Fabricación personalizada

La fabricación personalizada de marca blanca se refiere a la práctica minorista de convertir productos farmacéuticos genéricos o personalizados en artículos comercializables que compiten con las marcas nacionales. Las empresas intermediarias y los minoristas que compran a los mayoristas pueden cambiar la marca y personalizar estos productos y, a menudo, los venden con un descuento en comparación con los productos de marca.

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Las especialidades de SIDDHA GLOBAL incluyen la fabricación farmacéutica personalizada procedente de plantas con certificaciones GMP y OMS. Las pequeñas empresas y los minoristas se benefician enormemente de la venta de productos con etiquetas privadas. Las empresas que trabajan con nosotros pueden vender productos de marca privada a precios más bajos que sus contrapartes de marca y al mismo tiempo conservar una mayor parte de las ganancias, ya que hay menos intermediarios entre el fabricante y el minorista.

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Los productos de fabricación personalizada o de marca blanca hacen algo más que mejorar los márgenes de beneficio. Las prácticas de etiquetado blanco implementadas con éxito establecen una mayor confianza entre el consumidor y los minoristas porque:

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• Las apariencias importan: en mercados altamente competitivos, es importante tener un empaque y etiquetado que permita que su producto se destaque. El etiquetado blanco permite a las empresas tener más control sobre su imagen y estilo de marketing.

• Los consumidores se están desvinculando de las marcas nacionales, pero aún quieren tranquilidad: el estigma que rodea a los productos farmacéuticos genéricos y de venta libre está desapareciendo, especialmente porque los productos de marca blanca tienden a costar menos que sus pares de marca. Los productos farmacéuticos de marca privada de alta calidad desempeñan un papel fundamental en la mejora de la notoriedad de marca de su empresa.

• El empaque es tan informativo como el de los productos de marca: los productos farmacéuticos y cosméticos deben educar a los consumidores sobre cómo usar el producto y qué resultados esperar. Los reguladores gubernamentales y de terceros no solo exigen etiquetas claras y efectivas, sino que también establecen aún más la confianza del cliente en el producto de marca privada.